¿Qué es un contrato de licencia de marca?
Un contrato de licencia de marca es un acuerdo legal donde el titular de una marca permite a otra persona o empresa usar esa marca bajo ciertas condiciones.
Tú, como licenciante, mantienes la propiedad de la marca, pero das permiso (licencia de uso) para que otro la explote comercialmente. Esto suele hacerse a cambio de un pago, conocido como regalía o canon. Por ejemplo, si eres dueño de una marca de ropa, puedes firmar un contrato de licencia para que otra empresa fabrique y venda productos con tu logo bajo ciertas condiciones.
El licenciatario es quien recibe el derecho a usar la marca. Este debe cumplir con las condiciones que acuerdas en el contrato, como límites de tiempo, territorio, productos autorizados y estándares de calidad.
¿Cuándo necesitas un contrato de licencia de marca?
Necesitas un contrato de licencia de marca cuando el licenciante quiere permitir que un tercero, el licenciatario, use una marca registrada bajo condiciones específicas.
Esto suele ocurrir si deseas ofrecer tus productos mediante otra empresa o persona, o si buscas expandir el alcance de tu marca sin invertir directamente en nuevas operaciones.
Otra situación común es cuando has desarrollado una reputación y deseas monetizar tu marca permitiendo que otros licenciatarios la utilicen en sus propios productos o servicios, asegurando siempre controlar el uso y la calidad vinculada a tu imagen.
Es obligatorio formalizar este contrato por escrito para inscribir la licencia en el Registro de Marcas, por ejemplo, ante la OEPM en España. Sin este documento, el licenciatario no podrá usar la marca legalmente de manera oficial.
También se hace indispensable cuando se quieren establecer límites claros sobre el territorio, el plazo o la forma en que el licenciatario podrá utilizar la marca.
Además, permite definir aspectos como pagos, exclusividad o derechos de sublicencia.
Situaciones típicas en las que lo necesitas incluyen:
- Ampliar tu negocio mediante franquicias.
- Permitir a socios comerciales usar tu marca.
- Proteger la reputación frente a mal uso por terceros.
- Gestionar el uso temporal de la marca por parte de licenciatarios mientras mantienes el control sobre ella.
Cómo redactar un contrato de licencia de marca
Paso 1: Identificación de las partes.
Empieza por identificar a ambas partes: el titular de la marca (licenciante) y el receptor del derecho de uso (licenciatario).
Incluye los datos completos de identificación de ambas partes (nombre o razón social, domicilio, NIF o similar) y una breve descripción de la marca objeto del contrato.
Esta sección establece con claridad quiénes son los responsables directos del acuerdo.
Paso 2: Alcance de las condiciones de uso.
Especifica el alcance del uso de la marca:
- Sectores económicos o categorías de productos/servicios donde podrá emplearse.
- Territorios geográficos autorizados.
- Si el uso es exclusivo, no exclusivo o limitado.
- Si el licenciatario puede o no sublicenciar la marca a terceros.
Paso 3: Duración del contrato.
Define con precisión el plazo de vigencia del contrato:
- Fecha de inicio y finalización.
- Condiciones de renovación automática o voluntaria.
- Posibilidades de prórroga.
Consecuencias legales en caso de resolución anticipada por alguna de las partes.
Paso 4: Condiciones específicas del acuerdo.
Incluye las condiciones particulares que rigen el uso de la marca:
- Criterios de calidad del producto o servicio asociado.
- Derecho del titular a supervisar y controlar el uso de la marca.
- Restricciones legales o de imagen.
- Compromiso de respetar la reputación y valores del licenciante.
- Cualquier cláusula adicional adaptada al sector o tipo de licencia.
Paso 5: Obligaciones del licenciatario.
Establece claramente las obligaciones financieras y operativas del licenciatario:
- Pago de regalías o cánones y su periodicidad.
- Presentación de informes periódicos sobre el uso de la marca.
Responsabilidad por mal uso o uso no autorizado. - Inclusión de cláusulas de penalización, resolución anticipada o indemnización en caso de incumplimiento.